- 8 galletas "Digestive" (120 gr.)
- 40 gr.
mantequilla sin sal
- 2 plátanos
maduros
- Zumo de medio
limón
- 1 cucharada
esencia de vainilla
- Dulce de leche
- 200 ml. nata
para montar
- 25 gr. queso mascarpone/ philadelphia
- 1 cucharada
azúcar
- Cacao en polvo
- Virutas de chocolate
Elaboración:
En primer lugar,
pelamos los plátanos; los cortamos en rodajitas finas y los pasamos a un bol. Los
rociamos con el zumo de limón y la esencia de vainilla; mezclamos bien para que
no se oxiden y reservamos.
Por otro lado,
trituramos las galletas hasta hacerlas harina. Las echamos a un bol junto con
la mantequilla (debe de estar con textura de “pomada”), y amasaremos hasta
formar una masa.
Cogemos unos
vasitos o unas copas, e incorporamos ésta masa en el fondo de cada uno de ellos.
Con la ayuda de una cucharilla, presionamos un poco para que se asiente bien.
A continuación,
repartimos las rodajas de plátano sobre la base de galleta, y encima vertemos
una buena capa de dulce de leche (unas 2-3 cucharadas, a gusto). Introducimos
en la nevera para que vaya enfriando.
Mientras tanto,
en un bol montaremos la nata. Una vez que haya cogido cobertura, añadiremos el
azúcar y el queso mascarpone/ philadelphia para conseguir una mayor consistencia.
Volvemos a meter en la nevera y dejaremos hasta que estén
bien fríos antes de servir.
Solo nos queda disfrutar de éste sencillo pero a la vez sabroso postre.
Nota:
Podéis utilizar cualquier tipo de galleta, ya sea "María", tostada... Yo he optado por galletas "Digestive", que mezclado con el conjunto, le da un sabor muy rico.
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