Ingredientes (4 personas):
- 1 kg. tomates de perilla
- 300 gr. cerezas
- 1 pimiento verde
- 150 gr. pan
- 125 ml. aceite de oliva
- 400 ml. agua
- Medio pepino
- 3 cucharadas vinagre de manzana
- 1 ajo
- Sal
- Pimienta
*Para decorar:
- Melón
- Cerezas
- Queso
- Hierbabuena
Elaboración:
En primer lugar, escaldaremos los tomates para que no resulte más fácil pelarlos. Para ello, le quitamos los pedúnculos, le hacemos un corte en cruz en la base y los echamos en una olla con agua hirviendo y sal. Los dejaremos en torno un minuto; con la ayuda de una espumadera, los sacaremos y los depositaremos sobre un recipiente con agua y hielo. Así, conseguiremos que la piel se contraiga, y podamos quitarle la piel sin dificultad.
En primer lugar, escaldaremos los tomates para que no resulte más fácil pelarlos. Para ello, le quitamos los pedúnculos, le hacemos un corte en cruz en la base y los echamos en una olla con agua hirviendo y sal. Los dejaremos en torno un minuto; con la ayuda de una espumadera, los sacaremos y los depositaremos sobre un recipiente con agua y hielo. Así, conseguiremos que la piel se contraiga, y podamos quitarle la piel sin dificultad.
Le retiramos la corteza al pan. En un recipiente hondo, incorporamos el
pan desmenuzado en trozos pequeños, el pimiento, el pepino pelado y troceado, el
ajo, un par de cucharadas de vinagre, un pellizco de sal, un poquito de
pimienta, el aceite de oliva, 200 ml. de
agua y el tomate troceado.
Trituramos e iremos incorporando agua hasta conseguir la textura y consistencia deseadas. Reservamos en la nevera.
Trituramos e iremos incorporando agua hasta conseguir la textura y consistencia deseadas. Reservamos en la nevera.
Con la ayuda del cuello de una botella y un palo de brocheta,
sacaremos los huesos de las cerezas. Le quitamos el rabo a la cereza, y la colocamos con el orificio hacia arriba sobre
el cuello de la botella.
Cogemos el palo de brocheta, y empujaremos con fuerza hasta
que el hueso caiga al fondo de la botella.
Repetiremos la operación con el
resto de las cerezas, y una vez que las tengamos todas, las agregaremos al
gazpacho y volveremos a triturar hasta conseguir una crema fina. Guardaremos
algunas cerezas para la decoración.
Colamos el gazpacho, rectificamos de sal y lo volveremos a introducir en la nevera hasta
que esté bien frío.
Servimos y acompañamos con unos dados de queso y de melón y unas cerezas
deshuesadas. Por último, espolvoreamos un poquito de
hierbabuena por encima y echaremos unas gotitas de aceite de oliva.
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