Ingredientes (4 personas):
- 4-5 patatas nuevas (1 kg.)
*Para la salsa brava:
- 400 gr. tomate triturado natural (3-4 tomates de perilla)
- 400 gr. tomate triturado natural (3-4 tomates de perilla)
- 1 cebolla pequeña
- 1 ajo
- 1 cucharadita pimentón dulce
- 1 cucharadita pimentón picante
- ½ pimientita de cayena
- 1 cucharada pimiento choricero
- 1 cucharadita azúcar
- 125 ml. vino blanco
- Aceite de oliva
- Sal
*Para la mahonesa al curry:
- 1 huevo “L”
- Aceite de girasol
- Unas gotas zumo de limón
- 1 cucharadita curry
- 1 manojito perejil
- 1 cucharadita orégano
- Sal
- Pimienta
Elaboración:
En primer lugar, prepararemos las salsas. Para la salsa brava, os
adjunto el siguiente enlace en el que podéis ver como se hace:
Para la mahonesa al curry.
En un vaso americano añadimos el huevo. Agregamos el
triple de aceite de girasol, una pizca de sal, otra de pimienta, hundimos la
túrmix hasta el fondo y comenzamos a batir a baja potencia, sin mover desde
abajo hasta emulsionar el huevo. Pasados unos segundos, comenzará a salir el color de la mahonesa y éste
se irá homogeneizando por todo el vaso. Llegado a ese punto, subiremos y
bajaremos la túrmix un par de veces. Añadimos el curry, un ramillete de perejil,
unas gotas de zumo de limón y el orégano; terminamos de triturar aumentando la
potencia de la túrmix hasta conseguir una textura espesa. Reservamos en la nevera.
Vamos
con las patatas.
Las
pelamos, las lavamos, las secamos con papel de cocina y las cortamos en dados o
en gajos generosos.
Cubrimos la base de una sartén con aceite de oliva (medio
dedo), y lo pondremos a calentar a temperatura media (5 de mi vitro), las
comenzamos a freír a fuego suave, dándole vueltas poco a poco para que vayan
cogiendo color por todos lados. Pinchamos con la punta de un cuchillo las
patatas, y si están tiernas por dentro, subiremos el fuego y las dejaremos que
se doren por fuera. Así conseguiremos que nos queden tiernas por dentro, y crujientes por fuera.
Retiramos
las patatas sobre papel de cocina para que absorban el aceite. Sazonamos, y emplatamos
decorando el plato con un poquito de las dos salsas.
Espero
que os hayan gustado y os animo a que las hagáis, ya que quedan deliciosas.
Nota:
Si
la mahonesa os queda muy espesa, podéis aligerarla con una cucharadita de agua.
Si por el contrario, la textura es muy líquida, iremos añadiendo aceite en forma
de hilo hasta conseguir el espesor deseado.
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