- 2 berenjenas grandes
- 550 gr. carne de cordero picada
- 3 patatas nuevas medianas
- 2 cebollas medianas
- 1 zanahoria
- 4 ajos
- 4 tomates de perilla
- 1 cucharadita azúcar
- 150 ml. vino blanco
- 1 cucharadita tomillo
- Romero
- ½ cucharadita canela en polvo
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
*Para la salsa de yogur:
- 75 gr. queso feta
- 1 yogur griego
- 1 huevo “L”
Elaboración:
Comenzaremos cortando las
berenjenas en rodajas de alrededor de medio centímetro de grosor. Las dispondremos
en una bandeja; salpimentaremos por los dos lados, y las dejaremos reposar alrededor
de 1 hora hasta que suden y suelten la acidez.
Pasada la hora, las secaremos
con papel de cocina y las depositaremos sobre una bandeja de horno forrada con
papel sulfurizado y pintada con aceite de oliva. Del mismo modo, pelaremos y
trocearemos en finas láminas las patatas, y las colocaremos en otra bandeja de
horno forrada con papel sulfurizado y también pintada con aceite de oliva. Echamos
otro chorrito de aceite de oliva por encima de las berenjenas y de las patatas,
y precalentamos el horno a 180º. Hornearemos ambas bandejas unos 25-30 minutos.
Reservamos.
Por otro lado, prepararemos la
salsa de tomate.
Rallamos los tomates. En una
sartén pondremos a calentar un chorrito de aceite de oliva. Incorporamos el
tomate, sazonamos ligeramente y añadimos el tomillo, un poquito de romero y una
cucharadita de azúcar para quitar la acidez del tomate. Removemos y dejaremos unos 25 minutos
a fuego medio hasta que haya reducido. Retiramos del fuego y reservamos.
Troceamos las cebollas y los
ajos bien finos.
En otra sartén con 5 cucharadas de
aceite de oliva, pocharemos en primera instancia las cebollas y los ajos.
Incorporaremos la zanahoria cortada en daditos y echaremos la carne picada. Salpimentamos y añadiremos el tomillo y el
romero. Removeremos y cocinaremos hasta que se haga la carne. Llegados a ese
punto, agregaremos el vino blanco, dejaremos a fuego fuerte unos minutos para
que evapore el alcohol y seguidamente echaremos la salsa de tomate.
Rectificamos de sal y pimienta si hiciera falta, echaremos la canela en polvo y
rehogaremos unos 10 minutos hasta que nos quede una salsa compacta.
Mientras se termina de hacer la
carne, prepararemos la salsa de yogur.
En un bol batiremos el queso
feta y el yogur griego con la ayuda de unas varillas. Una vez bien integrados,
añadiremos el huevo; volveremos a batir hasta homogeneizar. Reservamos en la
nevera. Para la ocasión, he utilizado éste queso feta.
Precalentamos el horno a 180º.
Vamos con el montaje de la Musaka.
Engrasaremos la base de una
bandeja refractaria apta para el horno con un poco de aceite de oliva. Colocaremos
una primera capa de berenjena, y encima una capa patata; seguiremos con una
capa de carne y una de salsa de yogur. A partir de aquí, repetiremos la
operación hasta que se nos acaben las berenjenas, patatas, carne y bechamel o
el molde dé de sí :)
Eso sí, en la última capa
echaremos la salsa de yogur restante, y sobre ella rallaremos abundante queso parmesano.
Espolvoreamos una pizca de canela en polvo e introduciremos en el horno.
Hornearemos unos 20 minutos,
dejando otros 5 minutos para gratinar.
Et voilà! Solo nos queda emplatar y disfrutar de éste plato de la gastronomía
griega.
Nota:
En la receta original, las berenjenas se fríen en una sartén con
abundante aceite de oliva; no os lo recomiendo, ya que, al confitarlas, os quedarán
empapadas de aceite.
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