- 4 lomos bacalao
desalado (800 gr.)
- 350 ml. aceite
de oliva
- 2 pimientitas
de cayena
- 5 dientes de
ajo
- Tomillo
(opcional)
- Perejil picado
Elaboración:
En primer lugar, procederemos a desalar el bacalao. Os dejo el enlace,
en el que podéis ver como se hace:
Una vez desalado, escurrimos bien y posteriormente secamos los lomos
con papel absorbente de cocina.
En una “perola” de barro ancha y plana, echamos el aceite.
Seguidamente, incorporamos los ajos pelados y laminados, junto con las
pimientitas de cayena picadas y un poquito de tomillo; con ello, infusionaremos
el aceite, y el bacalao se impregnará de estas especias que le darán un toque
más sabroso. Pondremos a fuego bajo al principio, y gradualmente subiremos la temperatura,
con el fin de evitar que nuestra cazuela de barro se resquebraje.
Cuando el aceite esté caliente y los ajos comiencen a dorarse,
retiramos la cazuela del fuego y dejamos que el aceite se temple. Una vez
templado, dispondremos los lomos de bacalao por toda la cazuela con la piel hacia arriba y volveremos a poner al fuego.
Cocinaremos a fuego medio-bajo (4
de mi vitro; temperatura que equivale aproximadamente a 60º) una media hora,
moviendo la cazuela por las asas de forma constante, para que la gelatina que
vaya soltando el bacalao, comience a ligar con el aceite y de ésta forma vaya
espesando un poco.
En los últimos minutos de cocción, le daremos la vuelta a los lomos
para que se hagan por la parte de la piel. Tened cuidado a la hora de manejarlos,
ya que al estar cocidos, puede que se os desmenucen a la hora de voltearlos.
Una vez cocinados los lomos de bacalao, los retiraremos a una fuente y
reservaremos momentáneamente.
La salsa que queda en la cazuela, aún no estará lo suficientemente
espesa; para conseguir pues el “pil-pil”, echaremos ésta en un bol para que se
temple. Ya templado, vertemos la salsa poco a poco en una sartén y con la ayuda
de un colador, realizamos movimientos circulares hasta que comience a
emulsionar y termine definitivamente por ligar y espesar.
Finalmente, servimos los lomos de bacalao en los platos, y echamos el “pil-pil”
por encima.
De acompañamiento, he optado por una guarnición de patatas
Hasselback que también podéis ver en las entradas de mi blog. Decoramos con un
poquito de perejil picado, y a comer!
0 comentarios:
Publicar un comentario