Ingredientes (25-30 galletas):
*Para la masa de galleta:
- 400 gr. harina de fuerza
- 250 gr. mantequilla sin sal
- 25 gr. levadura fresca de
panadería
- 1 yogur natural (125 gr.)
*Para el relleno de compota de
manzana:
- 3 manzanas reinetas
- 80 gr. azúcar
- Zumo de un limón
- 1 cucharadita de canela
- 2 clavos
- Un chorrito de ron
- 80 gr. nueces troceadas
- 40 gr. pasas de Corinto
(opcional)
Elaboración:
Comenzaremos preparando la masa
de las galletas.
En un bol tamizamos la harina.
Cortamos la mantequilla en
taquitos y mezclamos con la harina. Vamos amasando con las yemas de los dedos hasta
formar bolitas como si fueran unas miguitas de pan. Desmenuzamos la levadura
fresca, y la añadimos al bol; amasaremos nuevamente hasta que quede bien
integrada con la mezcla de harina y mantequilla.
Seguidamente, incorporamos el
yogur, y con una espátula de goma mezclaremos bien. Nos quedará una masa un
poco grumosa, a la cual le daremos forma de bola.
La envolvemos en papel film,
y la metemos en la nevera alrededor de 1 hora.
Mientras reposa la masa, haremos
la compota de manzana.
Para ello, previamente rallaremos
las manzanas. He elegido éstas manzanas "reinetas", aunque podéis utilizar las manzanas que más os gusten.
En un cazo, las pondremos a
cocer, junto con el azúcar, el zumo de limón, el chorrito de ron y los clavos.
Cocinaremos a fuego
bajo (3-4 de mi vitro), removiendo de vez en cuando, hasta que las manzanas
adquieran un color pardo y el líquido se evapore.
En unos 25 minutos la
tendremos lista.
Retiramos del fuego y quitamos
los clavos.
Agregamos la cucharadita de canela, las nueces troceadas y las pasas
(opcional), y mezclamos con la ayuda de una espátula. Dejaremos atemperar antes
de rellenar las galletas.
Sacamos la masa de la nevera. La
dividimos en porciones de unos 35-40 gr. y formamos bolitas con cada una de
ellas.
Cogemos cada bolita, y le damos
forma de cuenco.
Echamos unas cucharaditas de compota de manzana, y las
sellamos como aparece en la imagen.
Precalentamos el horno a 180º.
Depositamos las galletas sobre
una bandeja de horno forrada con papel encerado, dejando la parte que hemos
sellado hacia abajo.
Aplastamos un poco para darle forma de galleta, y
hornearemos en torno a 30-35 minutos, hasta que nos queden doraditas. Para
evitar que se nos quemen, a mitad de cocción podemos ponerle por encima una
hoja de papel de aluminio.
Pasado ese tiempo, las sacamos y
las dejamos enfriar. Espolvoreamos azúcar glas y un poquito de canela antes de
servir...
Y listas!
Solo queda disfrutar de ellas :)
Nota:
La mantequilla debe de estar
bien fría, para evitar que se deshaga al contacto con nuestras manos y se pueda
integrar adecuadamente en el momento en el que añadamos la harina. No hay que
amasar como si estuviéramos haciendo masa de pizza; con las yemas de los dedos
será más que suficiente.
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