Torrijas de leche (Receta tradicional)

Ingredientes (4-5 personas):

- ½  hogaza de pan del día anterior

- 500 ml. leche entera

- 2 cucharadas azúcar

- 1 rama de canela

- Cáscara de naranja y limón

- Un chorrito de anís

- 3 huevos batidos

*Para rebozar:

- 2 cucharadas azúcar

- 2 cucharaditas canela en polvo

Elaboración:

Comenzaremos aireando la noche anterior el pan de las torrijas. En mi caso, he escogido la mitad de ésta hogaza de pan (la otra mitad la emplearemos para las torrijas de vino y miel :)), típica de pueblo, aunque podéis utilizar el pan que más os guste. 

Cortaremos rebanadas de un dedo y medio de grosor, y las dejamos al aire en una bandeja toda la noche.

Al día siguiente, infusionaremos la leche. Para ello, en un cazo la llevaremos a ebullición junto con el azúcar, las cáscaras de limón y de naranja, la rama de canela y un chorrito de anís.

Justo en el momento que arranque a hervir, retiraremos del fuego, y atemperaremos. Seguidamente, colaremos la leche sobre un recipiente y la introduciremos en la nevera hasta que se enfríe totalmente. Si la echásemos caliente a las rebanadas de pan, correríamos el riesgo de que éste se nos desmigase.

Una vez haya enfriado la leche, la verteremos sobre la bandeja con el pan, y las empaparemos bien. Las dejamos reposar hasta que hayan absorbido completamente la leche.

En un cuenco, mezclamos el azúcar con la canela en polvo. Reservamos.

Por otro lado, en una fuente grande batiremos los huevos.

En una sartén, calentaremos abundante aceite de girasol con unas cáscaras de limón y de naranja. Cuando el aceite esté caliente, las apartaremos.

Pasamos las torrijas por huevo, y las freímos.

Las doraremos por ambas caras, y las retiramos sobre un plato con papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.

A continuación, las emborrizamos en el cuenco que habíamos reservado con el azúcar mezclado con la canela en polvo.

Ya solo nos quedará disfrutar de ésta receta tradicional de Semana Santa.

Hasta la próxima =)

Nota:

Un buen truco para que nos salgan unas buenas torrijas, es batir bien los huevos antes de rebozarlas. Con ello, evitaremos que nos salga “espumilla” al freír, y nos durará más el aceite.