Ingredientes (4 personas):
- 400 gr. macarrones
- 5 tomates de pera
- 2 cebolletas
- 3 ajos
- 3 salchichas
- 1 chorizo
- 200 gr. carne picada mixta
- 2 lonchas jamón york
- 3 cucharadas sobrasada
- 6 champiñones
- 2 hojas de laurel
- 1 cucharada azúcar
- Tomillo
- Orégano
- Queso Emmental
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva
Elaboración:
En primer lugar prepararemos el sofrito.
Rallamos los tomates y los echamos en un bol. Reservamos.
En una sartén con un chorrito de aceite, comenzaremos a pochar una cebolleta
y un ajo previamente pelad@s y trocead@s.
Salpimentamos. Cuando hayan cogido color, añadiremos el tomate rallado y
una hoja de laurel. Echaremos una cucharada de azúcar para quitar la acidez del
tomate, y dejaremos a fuego medio hasta que se evapore el agua que haya soltado
el tomate.
Mientras tanto, nos pondremos manos a la obra con las chacinas.
Cortaremos las salchichas, el jamón york y el chorizo en trozos
pequeños. Por otro lado, laminamos los champiñones.
En una cazuela con un chorrito de aceite, sofreímos la carne picada y
las salchichas. Dejaremos unos minutitos, y seguidamente incorporaremos el
resto de embutidos troceados. Cuando las carnes hayan cogido “colorcito”,
añadiremos la sobrasada, la otra cebolleta troceada y los ajos bien picaditos.
Salpimentamos.
Con una cuchara de madera, iremos removiendo bien para que no se nos
pegue. Espolvoreamos un poco de tomillo, y agregamos los champiñones. Removemos
nuevamente, y dejamos que se hagan los champiñones unos minutitos.
En otra olla grande, ponemos a hervir agua. Cuando empiece a hervir,
añadiremos los macarrones con un pellizco de sal.
A continuación, incorporamos a la cazuela de las chacinas, el sofrito
que habíamos preparado al comienzo. Con la ayuda de una espátula, removemos
bien.
Cuando los macarrones estén al dente (seguiremos la indicación del
fabricante, aunque en unos 8-10 minutos los tendremos en ese punto), los
escurriremos y los remojaremos con agua fría para cortarle la cocción.
Una vez escurridos, los pondremos en la cazuela con las chacinas y el
sofrito, y removeremos hasta integrar completamente. Espolvoreamos un poquito
de orégano, y pasaremos el conjunto a una fuente refractaria adecuada para
horno. Yo he empleado una fuente de barro.
Rallamos el queso, y los esparcimos por encima de los macarrones. Introducimos
en el horno, y gratinaremos hasta que el queso quede bien doradito.
Buen provecho!
Nota:
En lugar de azúcar, podemos echar una cucharada de miel para quitar la
acidez del tomate.
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