Como me seguía picando el gusanillo de la "plastilina", al venir de Mallorca de vacaciones, me puse manos a la obra con otra tarta. En ésta ocasión no fue un cumpleaños, sino una tarde libre que estas mano sobre mano y no hay mucho que hacer.
La había echado el ojo en una ocasión a ésta tarta coche, encontré hueco como "José Mota" y me puse a ello. Me llevó bastante rato, sobre todo en los detalles que es en lo que más tiempo se invierte. Pero quedó igualmente llamativa y sobre todo buena de sabor, que al fin de al cabo es lo importante ;)
Aunque no fuera un cumpleaños, la tarta quedó bien repartida, porque todo este bizcocho para mis padres y para mí como que no nos hubiera cundido, jeje!
0 comentarios:
Publicar un comentario