Ingredientes (4 personas):- 180 gr. chocolate blanco
- 32 galletas (1 paquete)
- 150 ml. leche entera
- 200 gr. mermelada de fresa
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Chocolate fondant
- Guindas
- Hojas de menta
Elaboración:
Os dejo la foto con los ingredientes que he utilizado:
Empezaremos cogiendo un molde metálico y lo colocamos sobre un plato grande. Ponemos una capa de galletas en la base del molde, y las "emborrachamos" con la leche ayudándonos de una brocha de repostería. A continuación, incorporamos la mermelada de fresa y la extendemos alrededor de todo el molde cubriendo la totalidad de la base de galletas.
Colocamos otra capa de galletas, las bañamos con la leche nuevamente y por último esparcimos la mermelada. Repetiremos el proceso anterior hasta completar la altura del molde o hasta que se nos termine el paquete de galletas. En mi caso me salieron 6 capas.
Terminaremos de recubrir la tarta, con una última capa de galletas. Introducimos en la nevera un par de horas para que se asienten e integren las galletas con la mermelada.
Mientras tanto, fundimos el chocolate blanco al "baño María". Una vez fundido, agregamos una cucharada de aceite, para que, una vez que lo esparzamos sobre las galletas, no se nos quede hecho un mazacote y aún quede blandito para poder esparcirlo adecuadamente. Mezclamos bien.
Quitamos el molde que recubría las galletas y vertemos sobre ellas el chocolate. Introducimos durante 3-4 horas en la nevera.
Por otro lado, fundimos un poquito de chocolate fondant y dejamos caer unos hilos por encima del chocolate blanco a modo de decoración.
Finalmente, adornamos con unas hojas de menta, unas guindas o chocolate blanco rallado. Esto como siempre, a vuestro gusto ;)
Irresistible...
Nota:
Podéis usar cualquier tipo de galletas: Tosta Rica, María, Tostada...
Dependiendo del molde que hayamos escogido -cuadrado o redondo-, emplearemos un tipo de galletas u otras. En éste caso, he optado por un molde cuadrado, aunque la primera ocasión que hice ésta tarta, me decanté por uno circular, como se puede apreciar en la foto.
Empezaremos cogiendo un molde metálico y lo colocamos sobre un plato grande. Ponemos una capa de galletas en la base del molde, y las "emborrachamos" con la leche ayudándonos de una brocha de repostería. A continuación, incorporamos la mermelada de fresa y la extendemos alrededor de todo el molde cubriendo la totalidad de la base de galletas.
Colocamos otra capa de galletas, las bañamos con la leche nuevamente y por último esparcimos la mermelada. Repetiremos el proceso anterior hasta completar la altura del molde o hasta que se nos termine el paquete de galletas. En mi caso me salieron 6 capas.
Terminaremos de recubrir la tarta, con una última capa de galletas. Introducimos en la nevera un par de horas para que se asienten e integren las galletas con la mermelada.
Quitamos el molde que recubría las galletas y vertemos sobre ellas el chocolate. Introducimos durante 3-4 horas en la nevera.
Por otro lado, fundimos un poquito de chocolate fondant y dejamos caer unos hilos por encima del chocolate blanco a modo de decoración.
Finalmente, adornamos con unas hojas de menta, unas guindas o chocolate blanco rallado. Esto como siempre, a vuestro gusto ;)
Irresistible...
Nota:
Podéis usar cualquier tipo de galletas: Tosta Rica, María, Tostada...
Dependiendo del molde que hayamos escogido -cuadrado o redondo-, emplearemos un tipo de galletas u otras. En éste caso, he optado por un molde cuadrado, aunque la primera ocasión que hice ésta tarta, me decanté por uno circular, como se puede apreciar en la foto.
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